ENRACHADA

No había tenido una racha de mala suerte como esta. Las señales son clarísimas: problemas con recibos de banco y teléfono, una llanta ponchada, frustración creativa, caca de pájaro en mi cabeza, encuentros con seres destructivos y violentos... Y ya para terminar con el periodo "vacacional", hoy perdí mi celular de la manera más tonta. Pasé con mi prima a comprar un café en la esquina de Michoacán y Avenida México, o seaaaaaa, suuuuper condechi, ya lo sé. Estaba a reventar de "gente bien" (ja-ja), léase modelitos extranjeros, clase media intelectual, famlias burguesísimas en plan dominguero tomando café y helados italianos mientras contemplan desde la terraza la lluvia azul de jacarandas en el parque. Hago una pausa en el paseo para ir al baño y, para que no se me cayera el celular al wc, me lo saqué de la bolsa trasera de mi faldita de mezcilla y lo dejé encima de una silla. (por qué hay sillas adentro de un baño???) Pues andaba yo "tan café con leche", como diría Cortázar, que me fui sin recoger mi celular y alguien "lo tomó". Pero seguramente era "gente bien", (o sea, que alivio, nooo?). Muy condechi muy condechi pero con las uñas bien largas. Me di cuenta una hora después, volví al cafecito y nanai, nadie sabía nada. El afortunado ganador tuvo, por lo menos, la amabilidad de apagarlo y no hacer llamadas a China... o a Rumania. Sí, dije a Rumania, porque una vez unos gitanos me robaron mi celular, también en un café, y en lo que me daba cuenta llamaron a toda su balcánica familia. Seguro dijeron vénganse para acá que hay un montón de estudiantes extranjeras en la baba más absoluta. Ni pex, estoy enrachada. Claro que en Telcel me dijeron ochenta razones por las cuales "El sistema" (cada día me sorprendo más del poder de la Matrix) no admite reactivarme el servicio porque tiene que ir el titular del teléfono, o sea, mi papá. Esto tiene muchas moralejas pero creo que la más práctica sería sacar mi tarjeta de crédito y empezar a generar historial, cosa que me causa un agobio increíble porque no puedo dormir si tengo deudas, me revienta hacer fila para pagar a fin de mes, etc. Pensé que podía seguir viviendo sin enriquecer a los bancos pero creo que ya me llegó el día.
Dice mi amiga Esther que este tipo de pérdidas son parte del proceso de depuración en el que estoy. Quiero creerle y no pensar que el destino me juega una mala broma. Por su parte, la pelirroja me dice que Dios aprieta pero no ahorca, y yo pienso "seguro me falta humildad, paciencia, disciplina, valor..." La sabiduría popular pregona que no hay mal que dure cien años. Pues sí, me imagino que nadie llega a los cien años con tan mala racha. Ya qué. Las señales están ahí y yo no entiendo nada. Estoy decidida a dedicar la mayor parte de mis días a la escritura. Eso intenté hacer en esta semana "de descanso". No me fue tan mal, francamente, y hasta voy a mandar dos o tres textos a un concurso. Digan lo que quieran, si los premios están todos manoseados no es mi bronca, yo me estoy disciplinando. Mientras estuve en casa todo funcionó bien, nada más salía a resolver mis pendientes y todo se iba al carajo. Me siento pesimista. Lo peor es que ni siquiera puedo tirarme un poquito al drama porque entonces hace su flamante aparición la voz de mi conciencia, que no es un modesto pepe grillo sino un tremendo manatí con doctorado en tortura emocional: "mira, tu actitud no ayuda en nada, eh, más te valdría ponerte a pensar que no estás haciendo lo correcto, porque la vida real, reinita..." SILENCIO POR FAVOR. ¿Qué me quiere decir la vida con todo esto?

Comentarios

ODC dijo…
No se apure mi Lucecita, mejor cómprate un celular de 200 pesos y amárratelo con una cadenita si no puedes evitar olvidarlo en "la silla del baño", porque viviendo en el DF, con buena o mala suerte te lo van a seguir volando. Un beso. lc
Anónimo dijo…
PUES NO TENGO EL GUSTO DE CONOCERTE, PERO ve que a todos nos pasa algo en algún momento. Se me saltaron las mayúsculas, pero no te estoy gritando.
Un viejo como yo puede decirte que en realidad ni siquiera has tenido muy mala suerte. Tienes (o deberías tener) una lista de teléfonos en Rumania para comunicarte con desconocidos y ambientar tus escritos sobre vampiros. ¿Qué, que no escribes sobre vampiros? Entonces que te sirvan para saber sobre qué deberías escribir. Comienza por leer LA HISTORIADORA. La caca de pájaro sirve como abono, así que tal vez te salga más cabello. Si a los hombres les gustas en bicicleta y te molestan los piropos (ya sé que luego decimos puras babosadas hasta hirientes, pero eso no es mala suerte, es pendejez masculina), entonces camina. Así, por lo menos no andarás con prisas y podrás mentarles la madre pausadamente, porque si eres atractiva (intelectualmente lo eres y físicamente no hay mujeres feas, así que tú dirás) seguirás recibiendo palabras agradables e insultos majaderos, ni siquiera hirientes. En fin, que si algo nos sale mal, siempre habrá algo que pueda salir peor, y habrá alguien a quien le esta saliendo todo más mal que a nosostros.
Eres joven, guapa, inteligente, capaz, ocurrente, graciosa, comediante... ¿qué más quieres?
Recibe un saludo afectuoso de un lector ocasional al que no conoces ni quieres conocer. Pero si quieres mentarme la madre por metiche, te dejo los datos para que no lo hagas público. La discreción es valor de la gente sensata. La sensatez es obstáculo para la evolución y la revolución, pero permite construir amistades largas.
Cuídate, pues.
tandiego21@hotmail.com
Tandiego, no voy a mentártela. Hago público el agradecimiento por un comentario tan abierto y honesto. =) Por aquí nos vemos. Abre tu blog para que te visitemos, y si ya tienes, pues pásalo. Voy a leer el ibro que me recomendaste. Un abrazo!