MEMORIOSA

Para el Rajah Dahir,
que al igual que Ibn Hazm de Córdoba
busca el misterio de la dualidad
escondida en la raíz del corazón



No hay lugar donde no te huela
Estoy convertida en una gran nariz melancólica
Primitiva y silvestre
La ciudad se me convierte en jardín
en mercado en vagón de metro en perfumería
No hay lugar donde mi nariz no te encuentre
ni hoja de libro ni cuello de camisa ni templo del siglo deciséis
Deprisa en un sueño o estacionado en un cajón
se me aparece alguno de tus cincuenta y dos aromas
catalogados por mi nariz memoriosa
Ya no hay lugar donde no te huela
el pliegue de mis ingles
la comisura de mi boca
el bulce de una idea...
Todos los tejidos del mundo están poblados de ti

Comentarios

Verónica Cento dijo…
Luza:

Este texto me gustó mucho. Un beso
Dylan Forrester dijo…
Huelo ciertos aromas al último poema que acabo de postear en mi blog, pero se entiende que en esta mundana vida los desgarros pueden ser parecidos, pero las heridas nunca son las mismas.

Un abrazo...
Anónimo dijo…
Mi niña... como siempre, abriéndome mundos inimaginados... como el de una nariz melancólica. Ojalá alguna vez pueda devolverte todo lo que me das con sólo evocarte, invocarte, convocarte. Te quiero.
- La huesín.